par

- ÉCUME et autres histoires
- 8.8 - La peur dans le miroir
- Seul le prix du sang
- Le livre de la désobéissance
- L’auto
- Histoires argentines
- Les Orages
- La perfection des cimetières
- L'Art d'aimer à Marseille
- L'Amérique centrale raconte 2015 - Centroamérica cuenta 2015
- L'Amérique centrale raconte 2014 - Centroamérica cuenta 2014
- Passionné et condamné - La pasión y la condemna
- Là, où vont mourir les fleuves
- If Marsella...
- If Marseille...
- Dernier voyage à l'université/Último viaje a la universidad
- Conférence sur la pluie - Conferencia sobre la lluvia
- Pichis
- Le roman du corps
- Séisme(s)
- À l'orée des ténèbres
- Tinísma - Une vie de Tina Modotti
- Bosque
- L'Amérique Centrale raconte 2016 - Centroamérica cuenta 2016
- Sacrifices au temps de Pâques
- L'Amérique Centrale raconte 2017 - Centroamérica cuenta 2017
- Ne pas toucher la queue du dragon
- Le linceul du vieux monde
- L'Amérique Centrale raconte 2018 - Centroamérica cuenta 2018
- Irapuato mon amour
- Histoires d'Uruguay
- La longue nuit de Francisco Sanctis
- Des animaux très sensibles - Trucha panza arriba
- Pourquoi j'ai enlevé Charlotte Rampling
- Les anges jouent des maracas
- Le Père et autres histoires
- Le ministre doit être exécuté
- Los albañiles
- Iode
- Saint Remède
- Almagro dans ses brumes
- Harraga
- Boléro noir à Santa Clara
Marsella en el año 2012. El azar y, sobre todo, la desorganización programada de un evento previsto para el año siguiente hacen que dos personas lleguen allí se conozcan.
Una es de Lille, al norte de Francia, el otro es mexicano. Ella es aún joven, muy en la onda y se mueve en la escritura-performance. Él, ya entrado en años, se conoce como un escritor famoso y muy leído. Invitados debido a las circunstancias, tendrán que escribir en contraparte un texto sobre Marsella: ella, un texto-performance y él, una novela. Deberán mostrar que al puerto mediterráneo, ya lavado y limpiado de sus antiguas manchas, le espera ahora el brillante futuro de de una ciudad decente, limpia, amable y sobre todo con cultura.
Pero bien se sabe que si ficción y realidad se admiran y se odian, atracción y repulsión se emparejan de maravillas. Y esto en Marsella, se hace mejor y peor que en cualquier otra parte.